Luces solares LED. Hoy en día, la posibilidad de poner un punto de luz sin necesidad de hacer una instalación que requiera tirar cable y que, además, no requiera prácticamente de mantenimiento, ya no es sólo una utopía.
Y es que, gracias a la evolución de tecnologías como la energía solar y sus paneles fotovoltaicos, unido a una mayor capacidad de acumulación de energía, con baterías de mayor carga, más rápidas y más pequeñas.
Si lo juntamos con la reducción de consumo que ofrecen las luces LED, nos encontramos con una solución ideal para numerosas necesidades de iluminación.
De hecho, muchas son las ventajas que nos ofrece el uso de las luces solares, sobre todo en un país con tanto sol como el nuestro. Ya que pone al alcance de nuestras manos, una energía limpia, accesible y muy rentable.
Las luces solares
Dado que su principal característica es el autoabastecimiento, su autonomía nos permite colocarlas en zonas donde sería muy complicado colocar una instalación eléctrica.
Por este motivo, se convierte en la opción ideal para nuestros jardines, ya que se pueden instalar allí donde lo necesitemos, incluso debajo del agua o en sitios donde el sol no esté incidiendo de manera directa.
Otro ejemplo lo encontramos en las terrazas de bares y restaurantes, donde ya no será necesario pasar el molesto cable de luz desde el propio local, invadiendo la zona de paso de los viandantes. De esta manera, con las luces solares, pueden añadir a las terrazas detalles de luz que creen ambientes mucho más atractivos y acogedores.
¿Y modelos de luces solares elegir?
Dado que la tendencia es aprovechar al máximo la energía solar en todo tipo de ámbitos, ya se pueden encontrar soluciones en todos los formatos de luminarias, tanto para uso particular, como público o industrial.
De hecho, ya hay infinidad de modelos de apliques solares, focos solares, balizas solares, farolas solares, etc.
Soluciones para todos los gustos
También podemos encontrar modelos donde la placa fotovoltaica está integrada en la propia luminaria en una sola pieza. Aunque existen modelos en los que la placa y la luminaria están separadas y conectadas por un cable.
De esta manera, podemos buscar una ubicación donde el sol le incida más directamente a la placa, y dejar la luminaria en zonas más oscura. Ideal cuando queramos un resultado más reducido y estético, como la sombrilla de la terraza de un restaurante.
Optimizamos la autonomía de la batería
Con respecto a la optimización del uso de la batería, gracias a sensores como el crepuscular o el de movimiento, las luminarias se encenderán en el momento necesario, permaneciendo apagadas o atenuadas en las horas del día o cuando no haya nadie en su área de influencia, alargando así su tiempo de autonomía.
Tecnología híbrida, también en las luces LED
Finalmente, en aquellos casos en los que se necesita garantizar un suministro eléctrico, la tecnología híbrida es la solución. Para ello, sí que será necesaria una conexión directa a la corriente, que proporcionará energía cuando las baterías no pueden, ofreciendo un importante ahorro en el consumo.
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